viernes, 29 de abril de 2016

El Sector Cultural Loja: la respuesta que se espera de nuestra parte

Por mucho se ha mantenido que Loja es la capital cultural del país y que es una verdadera cuna de artistas. Y puede que exista ese hálito inconfundible del cliché en este tipo de afirmaciones, sin embargo, no es menos cierto que la influencia lojana en la gestión cultural y artística en el país ha sido contundente e irrefutable.

Por esta misma razón, el Sector Cultural Loja ha decidido organizarse con motivo de la catástrofe de Manabí y Esmeraldas, a fin de aportar con uno de los recursos más potentes que tiene este territorio sur-fronterizo: su capital humano en la esfera cultural. Así, el Sector Cultural, bajo la coordinación de la Gobernación de Loja, ha reunido a todas las instituciones relacionadas con el hacer cultural, así como a los gestores culturales de organizaciones y colectivos independientes, para aunar esfuerzos y trabajar sobre la ¨reconstrucción emocional¨ de la niñez de la zona afectada.

El Voluntariado Cultural Loja ha acordado provisionalmente dos procesos concomitantes a la ayuda que se planea prestar: a) La organización de varios eventos durante el mes de mayo, con el fin de seguir recolectando donativos para enviar a la población de la zona afectada; y, b) Canalizar las propuestas de proyectos para la realización de la ¨Caravana Cultural¨, que consiste en llevar talleres, espectáculos, dinámicas pedagógicas y apoyo psicológico a la infancia de los sectores más afectados.

Hasta el momento se ha confirmado algunos eventos pensados para la recolección de donativos por parte de la Orquesta Sinfónica en conciertos de temporada; la Alianza Francesa ha anunciado que recibirá contribuciones en productos en las funciones de Cine que frecuentemente realiza;  La Dirección de Cultura y Patrimonio de Loja con el apoyo de una voluntaria profesional organiza el evento ¨Danza Solidaria¨; el Conservatorio Superior SBC también organizará conciertos con el mismo fin y en colaboración con establecimientos de educación secundaria de la ciudad. El próximo martes 02 de mayo (2016) la Gobernadora brindará una rueda de prensa para especificar avances, pues se están preparando otras aportaciones y eventos.

Por otro lado, ha habido otras reuniones e iniciativas del Sector Cultural independiente, como el organizado el día de ayer 28 de abril en el centro cultural ¨La Huerta¨, con la participación de varios activistas culturales, quienes han acordado proponer proyectos a las autoridades competentes para extender el apoyo artístico-cultural a la zona afectada. Este grupo ha sido categórico al aclarar que además de la ayuda efectiva que se pueda prestar a los damnificados por la catástrofe, a cambio se puede obtener el fortalecimiento del capital social tan necesario para la asociatividad y desarrollo de las redes de colaboración en el Sector Cultural.

Después de tan penosa catástrofe, parece ser que la construcción de la ¨Potencia Cultural¨ es la respuesta más firme que le puede dar el país a la naturaleza, desde una cultura de prevención… ¡Avanti!   

Fotografía de Pedernales, abril 2016. Cortesía: David Morocho


Redacción DirCom UNL, abril 2016
RVV/.

martes, 19 de abril de 2016

¿Quién genera -o no- la Solidaridad?

El concepto de ¨Solidaridad¨ en las ciencias sociales lleva tratándose durante mucho en las escuelas occidentales. Así, Durkheim es uno de los pensadores que inició el desarrollo de este tema en las esferas intelectuales francesas, y quien asumió el término ¨solidaridad¨ como un ¨hecho moral¨ relacionado con la cohesión social.  

Ha pasado mucho tiempo desde que se trabajaba con este concepto, y luego de los aportes neomarxistas sobre el capital, Putman desarrolla interesantes análisis con las estadísticas de varios países europeos, sobre el capital social, término que relaciona con los de ¨confianza social¨ y ¨conciencia cívica¨.

Y mientras existen datos del nivel de cohesión social de los países europeos, y existen estudios científicos que intentan conmensurarlos, en nuestro contexto local, sabemos que la capacidad de asociatividad es sumamente baja mediante información muy sencilla. Una ciudad que cuenta con un gran capital artístico, tiene muy pocas asociaciones de tipo cultural, por ejemplo.

Hay que preguntarse qué es lo que genera estas situaciones. Hay que cuestionarse si realmente es parte de nuestra idiosincrasia (¨lojano come lojano¨) o es el efecto de las pugnas partidistas enquistadas en las instituciones que más influyen en la mentalidad de los habitantes del territorio.

Una de aquellas instituciones, la Universidad o alma máter, precisamente ha sido el vórtice de permanentes pugnas viscerales que han definido cierto carácter, cierta desidia, cierta desconfianza hacia  las actividades más sacras, como lo son el estudio y la docencia. Y luego de haber transitado por una serie de persecuciones y bajo el gobierno de la impunidad, la ¨confianza social¨ solo podría ser una piltrafa que yace en el terreno de la impotencia.

Hace poco alegraba escuchar a un estudiante de psicología educativa desarrollar una pedagogía basada en el fortalecimiento de la acción colectiva; en la reducción de la competencia entre estudiantes para a cambio potenciar la colaboración entre estos: ¿quién dijo que todo está perdido?

Hoy, en tiempos de tragedia, se puede apreciar un sentimiento hermoso de solidaridad tan guardado y tan reprimido por siglos de sesgo étnico, cultural y clasista. Hoy respiramos una necesidad terrible por ayudar a nuestrxs compatriotas de la costa. Esto significa que aquel sentimiento solidario está latente y que es un valor imprescindible para quien quiera cambiar los destinos injustos de nuestro país.

Hoy una red de voluntarios, en diversas partes del país, respira un ambiente agradable al poder hacer algo más interesante que ver un partido de la ¨champion liga¨ o perder su tiempo en algún ¨tontódromo¨ sin más aliciente que un trago mezclado con cola. Hoy se ha visto una cadena de brazos que quieren sostener un alivio para quienes más lo necesitan en nuestro propio territorio nacional.

¨No hay mal que por bien no venga¨ queridxs estudiantes y comunidad en general; y que estos tiempos difíciles sirvan para ¨cambiar el chip¨ y respirar el aire de la confianza que genera el espíritu solidario. Que sea parte de nuestra nueva programación cultural, de nuestra renovada mentalidad:

Red de Voluntarios Zona 7 en el teatro Bolívar tras el radio maratón y entrega de recolección de donaciones 19/04/2016

Redacción DirCom, abril 2016
RVV/.

lunes, 18 de abril de 2016

¿La ética y la moral del bien común pueden evitar un desastre?

La palabra ¨desastre¨ encierra en su significado ¨un desorden celeste como augurio de desgracias y catástrofes¨, visto desde la naturaleza etimológica de la palabra. Esto nos indica desde luego, que tenemos como simples seres humanos que somos, poco qué hacer ante los designios del cosmos. Y como no somos tanto de una cultura que se dedica a observar los astros, pero sí somos de la que cree en un ¨demiurgo universal¨, el discurso cambia sus palabras claves, de cosmos a Dios.

Sin embargo, a veces es un poco delicado confundir las creencias con las imprudencias. Quizás no sea de creyentes, sino de imprudentes, evitar el cinturón de seguridad al momento de subir a un automóvil. Sin embargo, más de un ¨profesional del volante¨ me ha dicho que no le pasará nada y que se ¨ha encomendado a dios para que nada le suceda¨ para responder a mi inquietud de porqué no usa cinturón de seguridad cuando puede evitar un golpe o le puede salvar la vida misma. 

Hemos llegado a esos niveles, de negar la razón y dejarlo todo en manos de otros o de algo. Así, en días de tristeza y luto nacional, no recordamos algo que hoy es importante entender a cabalidad, y esto también se relaciona con nuestra ¨pérdida de memoria¨ histórica.

El terremoto de Quito ya nos dejó más de mil muertos varias décadas atrás. Quizás no sea culpa de nadie, sino de los astros… ¿O quizás tiene que ver con que ubiquemos nuestro hogar en zonas de riesgo? De ser así, se puede deducir que la pobreza (o mala redistribución de la riqueza) genera la ocupación de lugares no aptos para asentamientos, y que no es culpa de los gobiernos locales la ocupación ilegal de terrenos… ¿será culpa de Dios?  

Pero qué tal si un edificio se cae, en el intervalo de un terremoto, y no necesariamente por la fuerza de la naturaleza, sino por la falta de medidas de seguridad y de control al momento de construir. La compra-venta de firmas, la alcahuetería de los funcionarios encargados de ejercer control, la visión únicamente monetaria de quién paga estas pillerías… todo confluye a que una estructura sea tan endeble y que sin embargo en ella depositemos nuestras vidas.

¿Será que es la Universidad la que debe garantizar ingenieros y arquitectos preocupados por la seguridad de los hogares que construyen? ¿Será que la labor cultural de la Universidad no es únicamente en materia de artes, sino que se trata de algo un poco más estructural y vinculado a las actitudes que deben sembrarse?

Preguntémonos ¿cuánta gente murió por no proceder moral y éticamente al momento de construir? ¿Cuánto dinero habré ganado o me habré ahorrado para que incluso valga la pena sepultar a familias en escombros? Debemos preguntarnos, si la falta de una universidad pública honorable afecta solamente a los estudiantes de turno, o es un problema más grande de lo que parece. Recordemos que su labor es sembrar VALORES, destrezas y conocimientos.

Que estos tristes días sirvan para dar a luz una nueva conciencia que sane tanto dolor con espíritu y con fe en la ética y la moral del bien común. Paz en la tumba de todos nuestrxs hermanxs y que su muerte, en los casos de negligencia en la construcción, no sea en vano, y que nos deje una lección que se transforme en conciencia y prudencia.

Enlace: casa en Ayacucho y García Moreno, en Guayaquil
  Redacción DirCom UNL, abril 2016
RVV/. 

martes, 12 de abril de 2016

MataRumores y la Comunicación Institucional

Según la ¨Ley básica del rumor¨ de Allport & Postman, ¨la aparición del rumor, su intensidad y su tasa de difusión son una función del producto de la importancia de un evento por la incertidumbre o ambigüedad existente acerca del mismo¨. Así, cabe entender que, luego de que una de las instituciones más antiguas e importantes de la región sur-fronteriza como lo es la UNL,  no haya renovado el cuerpo docente titular en más de dos décadas, la importancia del evento trae consigo una gran expectativa en el medio local.

Por cuanto los rumores no construyen institucionalidad aunque pudiesen surgir de una enorme e intensa necesidad de información, pues ¨pueden interferir con los procesos comunicativos de la institución distorsionándolos y obstruyendo el logro de los objetivos fijados¨, es importante que los estamentos universitarios, tanto estudiantes, docentes, administrativos y trabajadores, de querer fortalecer al alma máter, bien debieran evitar la práctica del rumor.

Siguiendo a Muriel (1980) a través de su manual de Comunicación Institucional, para contrarrestar rumores que ya están circulando, como es el caso de que ¨se están vendiendo las preguntas para la prueba de oposición del Concurso UNL 2016¨ por poner un ejemplo, se debe asumir dos acciones: a) sensibilizar a los públicos internos que puedan estar difundiendo los rumores y que verifiquen sus fuentes antes de transmitirlos; y, b) fijar algún medio directo de comunicación al que cualquier miembro de la comunidad pueda acudir con facilidad para obtener información.

Con estas premisas, les invitamos a construir una Universidad libre de chismes, rumores y demás virus de la comunicación e información. La UNL posee varios medios de comunicación pero invitamos de sobremanera a revisar la información de la página web institucional de la Universidad Nacional de Loja (unl.edu.ec), y para efecto de reducir los rumores, el producto comunicacional de UCI, el MataRumores, te dará las dos caras de la moneda: el ¨mensaje alterado¨ y la información oficial. Esperamos pues, sean parte de la construcción de una nueva cultura comunicacional que tanto le hace falta a la institución y a la ciudadanía en general.  

¡Pulsa aquí y mata el rumor!
DirCom UNL, abril 2016
RVV/.